23 de diciembre de 2024

Realiza AGEO la proyección y conversatorio Animación mexicana, propaganda y Guerra Fría.

Realiza AGEO la proyección y conversatorio Animación mexicana, propaganda y Guerra Fría.

• Estudiantes del Centro de Educación Artística Miguel Cabrera y de la licenciatura en Artes Plásticas y Visuales de la UABJO dialogaron con personas expertas como Dan Bashara, Byron Davies, Derek G. Larson, Carlos Oliva Mendoza, Isabel Rojas y el director de la institución Manuel Alejandro Hernández Maimone

El Archivo General del Estado de Oaxaca (AGEO) en colaboración con el Salón de Cines Múltiples (Sacimu) llevó a cabo la proyección y conversatorio «Animación mexicana, propaganda y Guerra Fría», sobre el proyecto de propaganda anticomunista realizado en México de 1952 a 1956 con apoyo del gobierno de Estados Unidos. Público en general, personal académico y estudiantes del quinto semestre del Centro de Educación Artística Miguel Cabrera y de la licenciatura en Artes Plásticas y Visuales de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO) dialogaron con personas expertas como Dan Bashara, Byron Davies, Derek G. Larson, Carlos Oliva Mendoza, Isabel Rojas y el director de la institución Manuel Alejandro Hernández Maimone.

El conversatorio trató sobre el proyecto de propaganda anticomunista que fue poco conocido y que tuvo su sede en la compañía Dibujos Animados S.A., encabezado por Richard K. Tompkins, también director de Estudios Churubusco, quien reunió a muchos de los talentos más importantes de la animación mexicana de la época. De acuerdo con información del Centro de Cultura Digital (CCD) del Gobierno Federal, la mayoría de los colaboradores reunidos por Tompkins desconocían los fines propagandísticos de las caricaturas. Además, congregó a importantes directores de animación de Estados Unidos, e incluso talentos musicales como Juan García Esquivel.

El CCD explica que las caricaturas resultantes son fascinantes porque demuestran la línea borrosa entre la propaganda política y la maquila, por manifestar la convergencia de la animación mexicana y el estilo abstracto de animación del estudio United Productions of America (UPA) de mediados del siglo XX. También destaca que, a pesar de que la producción de las caricaturas recibió una cobertura significativa de la prensa cinematográfica mexicana en esa época, nunca vieron un estreno o distribución convencional. La proyección comprende las doce caricaturas, incluyendo ocho con bandas sonoras en castellano que durante mucho tiempo se creyeron perdidas y se basan en las recientes digitalizaciones de caricaturas por parte de los Archivos Nacionales en Washington D.C., así como en los nuevos descubrimientos de los investigadores sobre su producción y usos propagandísticos por parte de la Agencia de Información de los Estados Unidos (USIA).

El investigador de animación Dan Bashara, el filósofo de cine Byron Davies, el animador y docente Derek G. Larson, el filósofo e investigador Carlos Oliva Mendoza, la moderadora Isabel Rojas y Hernández Maimone, dialogaron con las y los estudiantes y público en general, haciendo de esta actividad una fructífera reflexión y retroalimentación desde la filosofía, la estética e historia del contexto político, social y económico en torno a la animación hecha en México en los años cincuenta.

     

Destacaron que a partir de archivos fílmicos como las animaciones producidas en México en los años cincuenta, se llama a la reflexión y comprensión de la población respecto de los contextos político, económico y social del México de ese entonces. En el conversatorio, las personas expertas resaltaron la importancia de ser entes críticos e invitaron a las personas presentes a conocer la historia del cine mexicano, así como diversas investigaciones que se han realizado en torno a los discursos políticos y económicos que se plasman en las caricaturas que actualmente se producen.

El director del AGEO Manuel Alejandro Hernández Maimone comentó que a través de esta actividad se buscó acercar actividades de la institución a nuevos públicos se promueve una cultura de consulta archivística entre las y los jóvenes a fin destacar la importancia de que conozcan el acervo y sus áreas públicas como un espacio de convivencia para todas y todos.