Victoria Brignell, una persona tetrapléjica, fue dejada por más de una hora en un avión al llegar al aeropuerto de Gatwick, en Reino Unido, debido a que ningún funcionario del lugar se dirigió a ayudarla.
Para que pueda bajarse de la aeronave, debido a que no puede utilizar sus brazos o piernas, ella debe ser levantada por dos personas que la pasen de su asiento a una silla de ruedas adaptada a los pasillos estrechos del avión para después ser trasladada a su silla de ruedas afuera.
“Reservé la ayuda con tres meses de anticipación, no fue como si simplemente apareciera, sabían que vendría. Además, les recordé hace dos y aún así no recibí el servicio que quería y esperaba tener”, comentó la mujer.
Aparentemente, al comienzo le dijeron que la espera tardaría tan solo 50 minutos. Sin embargo, esto no fue así: “Mi silla de ruedas llegó rápidamente, pero las personas que me ayudaron a bajar el avión no aparecieron, estaban ocupadas en otra parte”.
El personal de la línea ‘British Airways’, con quienes iba viajando, fueron los que la atendieron durante el tiempo que tuvo que esperar en el avión y, eventualmente, los que la ayudaron a salir de este.
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