La jauría de los grupos de presión tienen dueño; opinión de Alfredo Martínez de Aguilar

El saqueo de las arcas públicas por los dirigentes de 260 organizaciones políticas, sociales y agrarias, suma 36 mil millones de pesos cada año bajo el pretexto genialmente perverso de gestionar apoyos sociales para indígenas, campesinos y eufemísticamente los pobres.

* Con la actitud desleal de complicidad por corrupción de funcionarios de dependencias estratégicas como Finanzas y COPLADE, que traicionan a pueblo y gobierno, los dirigentes de organizaciones políticas y sociales, logran presionar y chantajear al Gobierno.

El avance del contenido de la entrevista que, amablemente, nos hiciera nuestra querida y admirada amiga Connie Baigorria para Heraldo Radio Tehuantepec en el 97.1 de FM, levantó polvo.

Afirmamos que la jauría de los grupos de presión política y chantaje económico tiene dueño. Basta ver el fierro que traen en las ancas para saber quién manipula a la mayoría desde hace medio siglo.

Las que más se movilizan con marchas, plantones, bloqueos de calles y carreteras, toma de casetas de peaje y oficinas, son 20 organizaciones políticas y sociales con la manida maniobra de realizar gestión social.

El saqueo de las arcas públicas por los dirigentes de 260 organizaciones políticas, sociales y agrarias, suma 36 mil millones de pesos cada año bajo el pretexto eufemístico de gestionar apoyos sociales.

Son los mismos de siempre, por ejemplo, desde la COCEI Morena, los hijos de su Excelencia, el Embajador de México en Venezuela, Leopoldo de Gyves de la Cruz, Lenin y Emilio de Gyves Montero.

Es el mismo caso de los hijos de Daniel López Nelio, Lenin, David y Tania, esposa de Emmanuel Alejandro López Jarquín, expresidente municipal de Santa Cruz Xoxocotlán y ex candidata de Morena a esa alcaldía.

Asimismo, es el caso de los hijos de Mariano Santana López Santiago, Daniel “Carteras”, ex secretario de Trabajo en el gobierno de Gabino Cué, sorprendido robando una cartera en Fábricas de Francia.

El actual Regidor de Obras Públicas y Desarrollo Urbano y de Centro Histórico del Ayuntamiento de Oaxaca de Juárez, Pavel Renato López Gómez, también forma parte de esta mafia familiar, y Roberto López Rosado.

También es el caso del Frente Popular Revolucionario (FPR) con el ex asaltabancos Germán Mendoza Nube y de Rogelio Vargas Garfias, dirigente radical de la UTE, corrido como Comisionado Municipal de Santa María Mixtequilla.

Macario Otalo Padilla, dirigente estatal del Frente Popular Revolucionario; de Arturo Ortega García del Frente Indígena de Pueblos Olvidados de Oaxaca (FIPO), y de Miguel Cruz, del Consejo Indígena Popular de Oaxaca, “Ricardo Flores Magón” (CIPO-RFM).

Jaqueline López Almazán, exesposa del profesor Samuel Hernández, dirigente del Comité de Defensa de los Derechos del Pueblo (CODEP) y Mauro Cruz Cruz, de la Asociación para el Fomento y Desarrollo de los Pueblos de Oaxaca (Afodepo).

Alejandro Escobar Sánchez, dirigente de la Organización Social 23 de Octubre; así como de

Saúl Pazos Pineda y de Rogelio Pensamiento Mesinas del Movimiento Unificador de Lucha Triqui (MULT).

Es el mismo caso del Movimiento de Unificación y Lucha Triqui Independiente (MULT-I) y de sus dirigentes Macario García Merino y Horacio Santiago García, quienes bañan de sangre la zona triqui.

Diputados locales manipulan a diversas organizaciones políticas, sociales y agrarias como Eva Diego Cruz, Sergio López Sánchez, Horacio Sosa Villavicencio, Lizett Arroyo Rodríguez y Nicolás Feria Romero.

De entrada, reiteramos que los grupos de presión, creados y alimentados por el propio Gobierno, representan para Oaxaca y los oaxaqueños la peor maldición desde la década de los 70.

En la entrevista trajimos a la flaca memoria colectiva la sabiduría del viejo sistema político mexicano que sintetizó con claridad que “en política, no hay perro sin dueño, ni caballo sin jinete”.

A partir de datos duros, diversos cibernautas confirmaron nuestro dicho al retroalimentar el proceso de comunicación de la emisión del mensaje e intercambio de opinión del receptor.

Coincidieron en sostener que existen muchos intereses oscuros y mezquinos que no se ven en Oaxaca, pero cuyas desastrosas consecuencias padecemos los oaxaqueños permanentemente.

Reiteraron lo sabido: exfuncionarios que tuvieron la oportunidad de acordar y ayudar a los dirigentes de los grupos de presión los siguen usando para cobrar facturas o mantener canonjías.

Su ventaja es que han aprendido a trabajar en equipo a nivel de mafia, con la complicidad por corrupción de funcionarios de algunas dependencias estratégicas como Finanzas y el COPLADE.

Merced a esta actitud desleal de algunos servidores públicos que traicionan a pueblo y gobierno, los dirigentes de los grupos de presión, logran presionar y chantajear al Gobierno. Y seguirán saqueando a Oaxaca como lo hicieron en el Gabino Cué.